jueves, 29 de septiembre de 2011

MOVIDAS DE DEATH VALLEY (III): BADWATER BASIN Y ARTISTS PALETTE

Tercera de las entradas sobre esta etapa del viaje, y no sé si será la última, porque cada día aparece algo nuevo.

En este caso se trata de Badwater Basin, probablemente la formación más conocida del parque, y de las pocas cosas que me sonaban antes de ponerme a cacharrear sobre el tema. Badwater es una cuenca endorreica (para los de la ESO: el agua no sale de aquí por un río, sino que desaparece filtrándose allá por el sur). Cuando llueve las sales presentes en el suelo se disuelven, y se forma una película fina de agua que tarda cero en evaporarse. Al hacerlo, las sales se cristalizan formando esta costra blanquecina tan característica que vemos en todas las fotos.



Lo que hace a este sitio aún más especial es que es el punto más bajo del hemisferio norte, a 86m bajo el nivel del mar. Se ven en las montañas de los alrededores carteles marcando la cota cero del nivel del mar. Esa es una de las fotos que busca todo el mundo.

Curiosidad rodriguezdelafuentesca: en estas aguas vive el Death Valley Pupfish, un animalito ultraprotegido por los servicios del parque. El bichejo se ha adaptado a vivir en estas aguas hirvientes y saladas, casi a punto para cocer unos espaguetis. Hay que estar zumbao.

Vamos a ponerlo en su sitio en el mapa: la entrada es por el norte, justo antes de Furnance Creek nos desviamos a la izquierda. Conducimos dejando a la izquierda Devil’s Golf Course (nombre muy apropiado), y tras 25 Km llegamos al punto más bajo. Ji-ji-ja-ja, habrá como 50 grados así que no creo que nos apetezca quedarnos mucho tiempo dando paseos por la sal y buscando pececillos. Daremos la vuelta para ver cómo es eso del Artists Palette.

Volviendo por donde hemos venido, a unos 6 o 7 Km, sale a la derecha una carretera de un solo sentido, hacia el norte, Artists Drive.

Cruzaremos los dedos para que no nos toque ningún tortugo/flanders delante, porque leo que debe ser difícil adelantar. A las 4 o 5 millas aparecen a la derecha estas formaciones.

Las sales del hierro producen los rojizos, amarillos y rosas; las micas en descomposición, los verdes y el magnesio pinta los morados. Curioso cuando menos, y parada obligatoria para los freaks mineros. Geología auténticamente en bolas para el deleite de vuestros ojos. Dicen que las fotos no hacen justicia, que hay que pararse y verlo en persona. Y seguimos.

Más adelante, ya de vuelta sobre la 190, tenemos Furnance Creek, un oasis de libro. Habitaciones a $300 la noche, campo de golf (hay que ser capullo), piscinas, etc… Y frente al hotel, la Old Dinah, este dinosaurio de hierro que hace más de cien años se movía con vapor.

Lo usaban para traerse lo que sacaban de las minas de los alrededores, como la que esperamos encontrar cerca del Racetrack. Creo que no tardaron mucho en darse cuenta de que era una ruina de cacharro. Se hundía en el terreno blando y está claro que no hay mucha agua en los alrededores para alimentar la caldera. Lástima. A pesar de tener 110cv. Como los leones TDI preeeemohh!!


En este sitio todo debe ser bastante más caro que en Stovepipe Wells, incluida la gasolina. Así que salvo que vayamos bajo mínimos, tiramos 25 millas más allá y en Stovepipe nos preparamos con calma para llenarnos de polvo por el desierto en busca del Racetrack.






martes, 27 de septiembre de 2011

MOVIDAS DE DEATH VALLEY (II): DANTE'S VIEW Y ZABRISKIE POINT

En esta entrada hay poco que escribir y mucho que ver. Se trata de dos balcones sobre el Valle de la Muerte, que quedan bastante a tiro (y por carreteras asfaltadas) de la ruta que seguiremos a través del desierto.

En primer lugar, a unos 25 Km de tomar la 190 en Death Valley Junction, nos desviamos a la izquierda y tomamos la Furnance Creek Wash Road - Dante's View Road durante unas 13 millas.


Ver mapa más grande

Llegamos a una explanada cómoda para aparcar, con una vista espectacular hacia el oeste, con el valle entero presidido por Badwater a nuestros pies.



Tras llenar media tarjeta de la cámara, volveremos por donde hemos venido para tomar de nuevo la 190 hacia el oeste.


A poco más de media hora sobre la carretera, llegamos a Zabriskie Point:


Paisaje marcado por relieves dorados moldeados a lo bestia por la erosión desde donde la vista también quita le hipo.



Y cinco minutos más allá, el desvío hacia Badwater. Pero eso lo dejamos para el próximo capítulo.

Como bonus de esta entrada, que si no va a quedar muy corta, dejo la ruta definitiva sobre Death Valley, con todos los desvíos que podemos tomar. El señor Google nos dice que son 360 millas y 12 horas de ruta, saliendo desde Las Vegas y llegando a Lone Pine donde podemos buscar alojamiento y una ducha para quitarnos el polvo del desierto. No sé cómo lo vamos a hacer para casar "Noche en Las Vegas" con "Madrugar", pero hay que hacerlo, porque si no esta etapa se nos va de las manos fijo.


Si anochece sobre las 21.30, no podemos jugar con que se nos haga de noche perdidos en el desierto. Los últimos 150 Km de esta etapa no tienen problema, pero tras el Racetrack, hay que llegar a la "seguridad del asfalto" con algo de sol. Lo de meternos de noche por un pista de tierra en el Valle de la Muerte suena a principio de peli de terror.





lunes, 19 de septiembre de 2011

MOVIDAS DE DEATH VALLEY (I): RACETRACK PLAYA

Si la hacemos, ésta va a ser la excursión más acojonante del valle de la muerte, serán horas rodando a través de la nada más absoluta, a través de carreteras y pistas para llegar a otra nada en la que las piedras se mueven solas. Mola, eh?


Es un lago seco, plano como si su superficie siguiera siendo de agua, tanto que sus extremos norte y sur, separados una distancia de 4,5 Km tienen una diferencia de altura de 0,04 m.
Está a 1.130m de altitud, y se llega en un rato desde Badwater (-86m), así que el que tenga la idea de que las carreteras de Death Valley son planas, que la vaya borrando de su cabeza.


Cuando llueve (de ciento en viento), el lago se cubre con una película de agua que se evapora enseguida, dejando la superficie cuarteada con poligonollios como los que se ven en la foto, de alrededor de 10 cm de diámetro.


Las teorías que explican por qué se mueven las piedras son miles, desde movidas magnéticas hasta cuentos esotéricos... yo me quedo con que las mueve el viento que sopla en la zona (más de 250km/h en tormentas), ayudado por el agua, que licua la superficie del lago, revive algas latentes que vuelven resbaladiza la superficie de la roca, o deshace lentamente cristales de hielo adheridos a los pedruscos (aquí debe hacer un frío que pela en las noches de invierno).
Sea como sea, se mueven una vez cada dos o tres años, así que al loro gañanes.


Ver mapa más grande

¿Cómo llegamos allí? Pues hay dos opciones, en la primera (y más larga) saldremos de la CA-190 hacia el norte un poco antes de Stovepipe (allí llegaremos para dar de beber a los potros, que es de las pocas gasolineras por la zona).
Tras unos 35Km por el desierto más acojonante (no hay NADA en la carretera) llegamos a un parque de caravanas y tomamos la Ubehebe Crater Rd.


Este cráter, con 1Km de diámetro y 237m de profundidad tampoco debe ser moco de pavo:http://en.wikipedia.org/wiki/Ubehebe_Crater


Lo dejamos atrás y la carretera gira hacia el sur, para llegar a Racetrack Playa unos 30 Km de ardiente desierto más allá.


Allí también encontraremos el Grandstand, un monolito que es el único relieve en los 8 Km cuadrados del Racetrack. Hay que sentarse en este banco a comer unas pipas.


De allí hasta llegar a la CA-190 de nuevo, son otros 50 Km de desierto, más nos vale llevarlo todo bien clarito, incluso "agua destilada" en el maletero porque son cerca de 200 Km de ruta, en los que lo más serio que veo es una mierda de parque de caravanas... así que nada de burnouts en el desierto ni excursiones gilipollescas por las dunas (o sin son, que sean pocos)

La segunda opción es seguir por la CA-190 hasta la altura del Racetrack (la marca B en el mapa), y tomar hacia el norte por alguna de las pistas que salen hacia la derecha. Son unos 50 Km ida y vuelta, nos perdemos el cráter, pero ahorramos unas horas y bastante saliva que tragar.


Como podéis ver en las fotos, nos hace falta un todo-terreno para esta excursión. Aquí os recomiendo meteros con el Street View a recorrer las carreteras de la zona. Yo os digo que acojonan, y os lo creéis o no, pero nada mejor que poner al paisanín en cualquier sitio y echar un vistazo alrededor. Esto no es Utah, no es Zion, Monument Valley o el Gran Cañón, aquí no hay más turistas que cuatro frikis zumbaos como nosotros. Mete miedo de verdad.



miércoles, 14 de septiembre de 2011

¿CAMBIAMOS EL ÚLTIMO TRAMO Y PISAMOS L.A.?

Ahora que nos hemos metido en harina a mirar el tema de los aviones, me ha surgido una duda. Y es que parece que todos los vuelos que salen de San Francisco cuestan el doble que los que salen de Los Ángeles. Hasta los internos para volver a Miami.

Por ejemplo, mirad los precios para volar a principios de Diciembre:

San Francisco - Miami: 250€
San Francisco - Orlando: 291€
Los Ángeles - Miami: 102€
Los Ángeles - Orlando: 109€

Por esto creo que deberíamos discutir un cambio en el final de la ruta, terminar en LA en vez de en SF. Os pongo los dos trayectos posibles desde Bishop, que sería el final de la etapa del Death Valley.

Pasaríamos del último tramo de la versión Mk3 ya conocida (627 millas):


A éste nuevo, con final en el aeropuerto internacional de LA. Serían unas 821 millas en total.


Ver mapa más grande

Si optamos por esta última, lo bueno que tiene, además de ahorranos mínimo 150 €, es que entramos por la parte interesante de LA: Hollywood, Santa Mónica, Beverly Hills y Venice Beach, básicamente lo que más merece la pena, destinos que nos habíamos resigando a perder pero que eran interesantes. Por otro lado, recorremos entero el tramo guapo de la CA-1, y cerca de LA se nos va a hacer el culo pepsicola con los pepinos que veremos.



Si nos quedamos con la opción inicial de vuelo desde SF, nos ahorraremos unas 200 millas y la aparición del Pacífico va a ser más mítica, porque lo vamos a avistar entre las montañas desde una mierdecilla de carretera que casi no sale en los mapas. También ganaremos algunas horas, probablemente medio día, porque el tramo será más corto.

Mi opinión es que podemos alargarlo y pisar (aunque sólo sea medio día) Los Ángeles. No sé si supondrá hacer una noche más, lo dudo porque son 300 Km a mayores. Pero con lo que nos ahorramos del vuelo vamos a tener suficiente margen de maniobra para que salga rentable.

Por cierto, en los mapas he metido una visita a Sausalito y Tiburón, un par de pueblos que molan mucho frente a San Francisco. Sausalito es el de las casas flotantes que debe haber salido en todos los Españolesporelmundo-callejerosviajeros... etc del mundo.


Esperamos opiniones, que esto es importante.

lunes, 5 de septiembre de 2011

NUEVA ORLEANS

A una distancia de unas mil y pico millas del punto de salida de nuestra ruta, tras dejar atrás Florida, Alabama y Mississippi nos encontramos con Nueva Orleans, la ciudad más poblada del estado de Luisiana.


Sobre la desembocadura del Mississippi y a tres metros bajo el nivel del mar (de aquí la liada con el Katrina) se levanta esta ciudad, que poco tiene que ver con el resto de las ciudades del país. Aquí el coche estorba, las calles estrechas y las casas bajas recuerdan más al estilo europeo que al americano puro y duro que veremos en las siguientes etapas, Houston y Dallas por ejemplo.

Esto es porque Nueva Orleans fue francesa y luego española antes que yanqui. Lecciones de historia aparte, vamos al lío. Tenemos que empaparnos del espíritu cajún, del vudú, del jazz y de una de las mejores cocinas que encontraremos en el viaje, y tenemos que hacerlo en un día, no vamos a tener más tiempo. Así que hay que llegar con la lección bien aprendida, no vale bajar del coche y quedarse con esta cara de Past - YaoMing mirando alrededor como un gilipollas.


Lo que vamos a ver en el día que tenemos será el French Quarter, según mis averiguaciones es un barrio de unas 14 manzanas de ancho encajonado entre el río, Canal St., N Rampart St. y Esplanade Avenue. Aquí se ve el French Quarter junto al distrito financiero. No tiene los mismos rascacielos que Manhattan pero el skyline de noche tampoco es feo.


Habrá que dejar el coche en el hotel o en alguno de los Park & Ride de las afueras, porque aparcar por el centro además de caro debe ser bastante difícil. Y por ejemplo sacarse un pase de turista para el tranvía, que sale por $5.


Uno de los sitios de visita obligada es el Café Du Monde, no porque tenga el mejor café ni los mejores bollos, pero todos sabemos como va esto. El sitio mola para el turisteo, está en el cogollo, tiene más años que el comer y sale en todas las guías. Por algo será, tendrá su encanto. Desayuno o merienda o lo que nos apetezca, cerdo y barato a base de Beignets (una especie de donuts) en el medio del barrio, junto a la catedral y el río.


La catedral de St. Louis, del siglo XVIII (de lo más viejuno que deben tener estos yanquis)

Bourbon Street, la columna vertebral del French Quarter, llena de garitos oscuros, tiendas de vudú, locales de jazz, restaurantes para todos los bolsillos, carros de caballos, frikis tocando el saxo, videoclubes sin vídeo... vamos, un desmadre. Ésta hay que recorrerla entera que debe ser un cachondeo.


Junto a Bourbon Street, en el 726 de St. Peter Street está el Preservation Hall:
http://www.preservationhall.com/hall/index.aspx Un local de jazz que recomienda todo el mundo. Parece que por $12 entramos, otra cosa será pillar sitio sentado. No está mal para tomar algo antes de salir de timba empapándose de jazz, en el sitio donde unos cuantos zumbaos con raices africanas le dieron forma, lo sacaron de las plantaciones de algodón y lo metieron en los bares.


Por cierto, la timba por la calle en Nueva Orleans tiene horario europeo, de 11 a 6 de la mañana. Algo que no vamos a ver en ninguna otra ciudad del viaje.

Más sitios que por lo visto merecen la pena, Pat o Briens:
http://www.patobriens.com/patobriens/ para tomarse un mítico Hurricane. Dicen que no te puedes ir de Nueva Orleans sin probarlos... pues les haremos caso.


Debe haber un museo de la Segunda Guerra Mundial espectacular, miles de historias de Vudú, probar los Poboys de Popeye, o Crawfish en Denny's son más recomendaciones. Una vuelta junto al río a ver si vemos un vapor de palas...


Lo bueno que tiene es que tiene pinta de quedar todo bastante a mano, con cachondeo y frikismo esotérico en cada esquina. Así que sabiendo unos cuantos sitios fundamentales, luego nos moveremos un poco según nos apetezca, que no vamos a perder mucho tiempo.

He leído que no hay que complicarse, hotel decente en el centro y nos olvidamos de historias. Los barrios periféricos aún no están reconstruidos después de lo del Katrina y la fauna local no tiene pinta de ser muy recomendable.


Por cierto, comprar souvenirs en Louisiana es chollo, si guardamos los recibos nos devuelven los impuestos en el aeropuerto cuando salgamos. Como si lo hubiéramos pillado todo en el Duty Free. Así que a llenar la maleta de muñequitos Vudú y mierdecillas variadas.