jueves, 26 de enero de 2012

CRUZANDO EL DEEP SOUTH

Situémonos: estamos en el segundo o tercer día de viaje, ya hemos dejado atrás la península de la Florida, y observamos cómo a través de las ventanillas empiezan a cambiar los paisajes y la fauna local. Los alegres jubilados al volante de flamantes Lexus descapotables se están convirtiendo en ultrarrepublicanos de dudosa higiene conduciendo camionetas desvencijadas, y las urbanizaciones con campos de golf dan paso a parques de autocaravanas y cabañas sobre pilotes de madera en el pantano. Chavales, estamos metiendo el hocico en el sur profundo.


En las siguientes líneas vamos a acercarnos a una parte del viaje en la que no hay grandes ciudades, ni paisajes espectaculares, ni playas paradisiacas, ni ambientazo nocturno (salvo en Nueva Orleans, claro). Esto es distinto, esto es el Deep South; la atracción serán las gentes, su cultura sureña y el estilo de vida Redneck. Pantanos infestados de reptiles, pájaros tropicales cantando al atardecer, mosquitos dando la brasa todo el día, paletos con la brizna de hierba en la boca tocando el banjo en una mecedora en su porche de madera… no sé si os vais haciendo una idea.


Nuestra famosa línea azul atraviesa cuatro de los estados que conforman el Deep South por sus extremos más meridionales (Sur para los de la ESO). Éstos son la parte continental de Florida, conocida como Florida Panhandle, Alabama, Mississippi y Lousiana. Por ponerle un principio y un final, tomaremos Tallahassee y Beaumont, al principio de Texas.

Ver mapa más grande

Es una zona del país con una personalidad muy marcada, que ha recibido unas influencias distintas al resto de estados. El clima tropical, la profunda religiosidad, las continuas invasiones, la mezcla de culturas que desde siempre existe por la zona, los esclavos que se trajeron, el hecho de haber pertenecido a varios países (estas tierras fueron españolas o francesas unos cuantos añitos)… han forjado esta parte de USA como una esquina única y muy diferente a las otras.


Históricamente, los estados del sur profundo (Carolina del Sur, Georgia, Alabama, Mississippi, Luisiana, añadiendo partes de Texas y Florida) mantuvieron hasta antes de la Guerra Civil una economía basada en la agricultura. Es por esto que no debe extrañar que se los conociera como los “Cotton States” y que fueran aquellos en los que primero prendió la llama de la secesión, ya se sabe “Si me prohíbes tener alegres trabajadores encadenados, ¿Quién va a recoger tooodo este algodón?”. Como desde el norte seguían diciendo que nada de esclavos, los sureños fundaron la Confederación, se rebelaron, y así por encima: estuvieron a cañonazos unos 4 años contra los del Norte (La Unión). Y he resumido la Guerra Civil americana en tres líneas, voy a presentarme al examen de ciudadanía, que lo voy a clavar…

Espabilao, a estos gorilas sí que les vas a servir, y encima te van a solucionar el mes...

Sin meterme en camisas de once varas, algo que se puede decir sin miedo a equivocarse es que los estados sureños llevan votando masivamente republicano desde que los demócratas decidieron apoyar el movimiento por los derechos civiles allá por los ’60.
Y nos vamos acercando al punto caliente de la entrada: el habitante modelo que perseguiremos a lo largo de estos estados, el Redneck. Sin acritud, el gañán yanqui por excelencia. El Redneck viste siempre un mono de trabajo y una camisa de cuadros o camiseta sin mangas, siempre con más mierda que la paellera de Villabajo, una gorra reventada de alguna marca de camiones, armas, maquinaria agrícola (John Deere), de la Nascar…


El Redneck siempre masca tabaco, o lleva entre los labios una hierba seca, va cocido, metido, y armado (escopeta de caza preferiblemente) y conduce una monstruosa Chevy o Ford con ruedas Big Foot de barro.

Definición gráfica de diversión

Vive en un parque de caravanas y con frecuencia se ve envuelto en turbios enredos con su familia, e incluso sus animales (“Ey prima-cuñada-hermanastra, lo que pasa en el granero, se queda en el granero…”)


Al Redneck le encanta ir de caza, la Budweiser y el whisky, aunque el orden de lo anterior le da lo mismo. Adora la Nascar (sobre todo cuando hay piñazos y los coches salen volando envueltos en llamas). Y lo que más nos puede importar a nosotros: el Redneck es territorial y posesivo, no tolera intrusos en su territorio, primero disparará y luego preguntará.

Esta foto no puede ser más jodidamente perfecta

Pero en el fondo tiene buen corazón, y le encanta llevar a su novia a pasar una tarde romántica en un Destruction Derby.


El Deep South es una zona con una densidad de población baja (para los de la ESO: chacho, no está petao de peña por aquí), y las ciudades que iremos cruzando son de un tamaño mediano-pequeño. Tampoco hay grandes atracciones turísticas, así que el plan por esta zona puede ser rodar y rodar, tragar millas y cuando nos aburramos meternos por una carretera secundaria paralela a la interestatal I-10, a ver qué se cuece.

Las ciudades que cruzaremos serán, entre otras:

1. Tallahassee (FL): Capital de Florida, con alrededor de 200.000 habitantes. Además de salir en el título de un capítulo de Lost, tiene multitud de edificios gubernamentales, como el capitolio, que cuenta con un edificio antiguo y otro moderno detrás. En esta ciudad hay un huevo de museos, entre los que destacan el de Historia de Florida, el de Historia Natural, y para gozo de nuestro frikismo: el de automóviles antiguos.


2. Pensacola (FL): Unos 60.000 habitantes. Además de una bonita playa, en esta ciudad merece la pena visitar el museo de aviación naval, que además es gratis!


3. Mobile (AL): 200.000 habitantes. En Mobile habría que darse una vuelta por el distrito histórico De Tonti Square, echar un ojo a los edificios de finales del S.XIX y principios del XX, y visitar el Battleship Memorial Park, en el que podemos visitar el USS Alabama, un mastodóntico acorazado de la Segunda Guerra Mundial, o un Lockheed A-12, entre otros.


4. Biloxi (MI): Un pueblón de 45.000 habitantes. Por lo visto entre sus calles se encuentra uno de los objetos más fotografiados del Sur de USA: un faro… estáis de coña?


5. Gulfport (MI): La segunda ciudad más poblada del estado con 70.000 habitantes. Poco encuentro de esta ciudad, sólo que el Katrina se cebó bastante con ella.

6. Nueva Orleans (LA): Echadle un ojo a su entrada. Aquí planeamos una parada larga.

7. Baton Rouge (LA): Es la capital de Louisiana, algo más pequeña que Nueva Orleans. Merece la pena subir al nuevo edificio del capitolio y observar el Mississippi, que a su paso por esta ciudad ronda el kilómetro de anchura.


A orillas del río también podemos encontrar majestuosas mansiones de antes de la guerra civil, y vapores-casino, perfectos para perder unos dólares al poker mientras se degusta un buen bourbon. Cruzaremos el Mississippi por el Horace Wilkinson Bridge. Típica fotografía sureña.


8. Lafayette (LA): Con 120.000 habitantes. En esta ciudad encuentro bastantes referencias a la cultura Cajún. Entre los edificios destaca la St. John’s Cathedral.


Recopilando, nuestro recorrido por el Deep South podría centrarse en observar al Redneck en su hábitat natural y en pillar al vuelo algún trazo de la cultura Cajún sureña: las grandes mansiones decimonónicas rodeadas de plantaciones, los impecables gentlemen sureños, los vapores del Mississippi, el bourbon, catar la gastronomía con influencia francesa…



No hay comentarios:

Publicar un comentario